El proyecto apuesta por una conexión más fluida entre Arucas, Firgas, Teror, Moya, Valleseco y la capital, integrando pasos soterrados, aceras y glorietas
Las obras de la nueva circunvalación de Arucas y el acondicionamiento de la GC-20 avanzan a buen ritmo. Esta actuación, impulsada desde la Consejería de Obras Públicas, Vivienda y Movilidad que dirige Pablo Rodríguez, representa un paso decisivo para mejorar la conectividad, la seguridad vial y la calidad de vida en el norte de Gran Canaria.
El proyecto, que está previsto que finalice en el primer trimestre de 2026, permitirá realizar una transformación del principal eje de conexión entre Arucas y Las Palmas de Gran Canaria, con importantes beneficios también para los municipios de Firgas, Teror, Moya y Valleseco. Más de 30.000 vehículos circulan a diario por esta vía, y esta intervención aliviará de forma significativa los problemas de tráfico que sufren miles de personas cada día.
Con una inversión de 16,8 millones de euros, financiada a través del Convenio de Carreteras Canarias-Estado, la obra contempla la renovación de 1.500 metros de vía, la ampliación del ancho de la carretera, la construcción de dos pasos inferiores y la reconfiguración de glorietas clave como las de la Cruz Roja y Visvique.
Además, el proyecto apuesta por una movilidad moderna e inclusiva, incorporando aceras y espacios que facilitarán el tránsito seguro de peatones y ciclistas.
La finalización de las obras está prevista para el primer trimestre de 2026, y supondrá un avance crucial en la apuesta de Coalición Canaria por un modelo de isla más conectado, equilibrado y con soluciones reales para sus ciudadanos.